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Este inmueble, denominado Casa Casabuena, fue la sede del Juzgado de Indias desde el siglo XVIII. Aunque el comercio de Castilla con las Indias era un monopolio controlado desde Sevilla, en el siglo XVI se dio al Archipiélago Canario privilegio de comercio directo con América. Para controlar esta actividad se creó el cargo de Juez de Indias.

En 1708, Bartolomé de Casabuena, propietario de esta vivienda, compró el título a perpetuidad, dando nombre a la casa. En su fachada destacan los elementos arquitectónicos de corte barroco, mezclados con otros de gusto neoclásico.

Desde 1918 fue ocupado por el Orfeón la Paz, entidad de carácter musical.